A las relaciones entre el gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria Correa y el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, se les puede aplicar adecuadamente la letra de aquel bolero del cantautor mexicano Javier Solís, La Retirada:
La distancia entre los dos
Es cada día más grande
De tu amor y de mi amor
No está quedando nada…
¿Y por qué? Porque las relaciones entre ambos están cortadas radicalmente.
La distancia entre los dos comenzó a convertirse una cruda realidad, desde que el mandatario local inició los ataques a los empresarios antioqueños por el tema de Hidroituango y a utilizar los calificativos con los cuales no estaba de acuerdo el gobernador Gaviria.
Sin embargo, la coyuntura que radicalizó sus posiciones se presentó con el fallo de la Contraloría General de la República y la condena a 26 personas y entidades jurídicas sobre el supuesto daño fiscal al proyecto Hidroituango.
El 7 de diciembre el gobernador Gaviria (foto) le marcó total distancia al alcalde Quintero (foto) sobre este caso, con esta frase que ´publicaron varios medios, entre ellos El Reverbero de Juan Paz:
“Soy claro, contundente, reiterativo”. Esas fueron las palabras previas que utilizó Aníbal Gaviria para hablar del pago de las aseguradoras en el caso Hidroituango. “Siempre he insistido en que las compañías de seguros deben pagar. Siempre he insistido en que este debe ser un propósito de todos los actores. ¿Por qué? Porque los seguros están bien contratados, porque tienen una cobertura de hasta 3.000 millones de dólares”.
Pero ya el 13 de octubre habían tenido un cruce de trinos sobre el tema de los seguros. Gaviria dijo que las compañías aseguradoras debían pagar la contingencia.
El alcalde Quintero le respondió con el siguiente Twitter:
“No señor Gobernador, no es un problema de seguros. Es un problema de dignidad. Que los responsables paguen por sus daños y no los ciudadanos. Seguros no cubren mil millones de dólares en daños (4 billones) ¿Por qué lo deberían pagar los ciudadanos?”
El gobernador Gaviria no le respondió a Quintero, pero este se vino con otro de este tono:
“El futuro energético del país se construye con honestidad, sin corrupción, con planificación y cumplimiento de la ley. Aquí hay detrimento de 12 billones de pesos de las y los colombianos que deben ser devueltos por las empresas y políticos responsables”.
Este 2 de febrero quedó confirmada la ruptura de las relaciones, pues el alcalde Quintero invitó al presidente Duque al acto en el cual anunciaría la fecha de arranque de las primeras turbinas, pero no tuvo en cuenta al gobernador. Duque no le asistió.
El gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria, se refirió a la reunión y anuncio que hicieron el gerente de EPM y el alcalde de Medellín.
Según el gobernador Gaviria, no fue invitado a este encuentro ni sabía que esta sería la fecha para poner en marcha Hidroituango, proyecto del cual Gobernación de Antioquia es accionista mayoritario.
“A mí no me invitó nadie (…) yo no quiero involucrarme en cosas que me parecen accesorias, como si el día de inauguración lo van hacer con bombas, aquí lo importante es que se ponga en funcionamiento para que se elimine el riesgo de las comunidades aguas abajo, para que se les pague a los socios y se produzca la energía que necesita Colombia”, afirmó Gaviria.
Y añadió:
“Ojalá sí se pongan en funcionamiento el 26 de julio, para que además se empiece a revertir los recursos a la Gobernación de Antioquia como socio mayoritario de la sociedad Hidroituango”.
Aníbal Gaviria reiteró que el techo financiero del proyecto tiene que ser los seguros contratados “las administraciones anteriores fueron las que contrataron los seguros y los contrataron bien por más de 3.500 millones de dólares, esa era la cobertura y ese debió haber sido el techo de la reclamación”.
De tu amor y de mi amor, no está quedando nada…